Cómo prepara con inteligencia una oposición

Habitualmente, los estudiantes nos preguntamos cuáles son las mejores fórmulas para organizarnos, repasar, memorizar… Además en una oposición, la eficacia en el estudio, y la memorización y consolidación del temario son fundamentales, ya que no solo debemos hacer un buen examen, si no que competimos por obtener una buena calificación respecto a nuestros competidores.

Normalmente no estamos bien informados sobre cómo preparar una oposición. En este artículo vamos a ver qué cuestiones debemos abordar para tener un sistema de estudio eficaz y una buena organización.

Es muy normal que al enfrentarnos por primera vez a una oposición, nos surjan muchas cuestiones, dudas y preocupaciones relacionadas con nuestro sistema o método de estudio, como por ejemplo:

¿Cómo tengo que organizarme para mejorar mi rendimiento? ¿Qué técnicas debo utilizar para memorizar los datos puros? ¿Cuánto tiempo debo emplearle al estudio cada día? ¿Cómo sé que realmente estoy memorizando lo que leo? ¿A cada cuanto debo repasar lo que ya he estudiado?…..

Esto nos sucede porque nunca nos han enseñado cuales son las estrategias más efectivas para estudiar. Muchos de nosotros irónicamente llevamos toda la vida siendo estudiantes, pero estudiantes sin método, estudiantes que no saben estudiar. Y por si fuese poco en una oposición nos jugamos meses o años de trabajo…

Lo habitual es estudiar a base de leer y leer…, repetir y repetir… ¿Pero esto realmente es eficaz?

Pues bien, acabamos aprendiendo algo sí, pero no suele durar mucho tiempo almacenado en nuestra memoria, y además necesitamos mucho más tiempo y esfuerzo para aprender, que si nos preparamos con las estrategias adecuadas.

Como psicólogo, atleta mental, estudiante y como preparador de opositores, sé que un buen sistema de estudios debe contemplar y trabajar cada una de estas variables:

La organización. Aprender a manejar un horario, una agenda, una lista de tareas… junto con otros sistemas de organización, nos permite tener más controladas y mejor distribuidas las horas semanales dedicadas al estudio. La organización es un principio clave, sin embargo son pocos los estudiantes que saben organizarse bien, y que llegan a cumplir sus objetivos relacionados con el tiempo dedicado al estudio.

Una buena organización comienza por abordar qué tipo de tareas realizamos cada día y cuánto tiempo le dedicamos a cada una. Esto depende del tipo de temario que tengamos y del punto en el que estemos…, peor debemos saber que tenemos que determinar cuánto tiempo le dedicamos a la selección de la información, a la memorización, al repaso… en cada sesión de estudios.

Además te aconsejo que hagas auto-registros sobre el tiempo dedicado al estudio cada día, y te animo a que aprendas a recompensarte cuando cumplas los objetivos de tiempo que te marques por semana.

Además la organización también afecta a nuestra capacidad de concentración. Visita este artículo para saber más.

El autoconocimiento como estudiante es algo difícil de conseguir, pero a su vez puede ayudarnos mucho a saber en qué condiciones rendimos mejor. No todo el mundo estudia bien de la misma manera, ni todos tenemos las mismas dificultades, ventajas, o vivimos en el mismo entorno.

Saber manejar un diario metacognitivo, en el cual anotamos nuestras experiencias durante el estudio, nos ayuda a comprender mejor qué nos es útil, y qué puede ser contraproducente para nosotros, por lo que registrar estas experiencias es un hábito muy recomendable.

Una buena elaboración o selección del temario es otro punto clave. A veces, cuando tenemos un temario muy extenso, nos encontramos totalmente perdidos y desorientados, sin saber por dónde empezar o como abordar tanto temario. La selección del contenido puede ser un tema complicado, con el que muchos estudiantes pueden tener problemas, pero con el tiempo aprendemos a hacernos las preguntas adecuadas para saber qué puede ser una pregunta de examen y qué no (ya que esto es lo realmente importante para obtener la mejor calificación posible).

La selección y elaboración del temario es fundamental, por lo que saber distinguir la información importante de la que es más irrelevante nos permite seleccionar la información correcta para trabajar sobre ella posteriormente. ¡Cuidado! toda la información es importante en cierto modo, pero no toda requiere de su estudio. Debemos saber que cuando hablamos de lo que “es importante”, nos referimos a lo que puede salir en el examen (y añadiría, que no sea información obvia, o que no la sepamos ya).

Una vez que hemos seleccionado la información, debemos saber elaborar con esta información buenos resúmenes personales, esquemas, mapas conceptuales, listas de memorización… lo cual también marca la diferencia a la hora de estudiar ya que nos ayuda mucho a comprender y a memorizar el temario, además de ahorrarnos muchísimo más tiempo del que podemos imaginar.

El buen manejo de las técnicas adecuadas de memorización es una de las piedras angulares del estudio eficiente, pero sorprendentemente es lo más desconocido  por los estudiantes. Personalmente creo que conocer las mejores técnicas para la memorización es la variable más importante para obtener los mejores resultados posibles.

Saber manejar un casillero mental, un palacio de la memoria, tener una buena velocidad de lectura, saber generar asociaciones mentales eficaces…. Tiene una increíble repercusión sobre nuestro rendimiento a la hora de memorizar.

En este punto añadiría algo, y es que no basta con conocer las técnicas, es conveniente que las sepamos manejarlas y utilizarlas adecuadamente, y esto último es lo más complicado. Mucha gente conoce estas estrategias, pero son pocos los que las saben utilizarlas correctamente, ya que hace falta entenderlas muy bien, y saber adaptarlas a un temario real, y para esto muchas veces es necesario un guía que nos enseñe a hacerlo.

En Escuela de la Memoria recibimos a mucha gente que conoce las técnicas, pero hasta que no realizan alguno de nuestros cursos o contratan nuestras tutorías, no se dan cuenta de lo alejados que estaban de saber emplearlas bien.

Además también hay otras variables (aparentemente ajenas al estudio), que son importantes. Por ejemplo mantener una buena higiene del sueño, tener una buena alimentación que nos permita rendir al máximo mentalmente…. Todo suma, y aunque quizás no parezca demasiado importante, si queremos obtener el máximo rendimiento todo tiene su importancia y cumple su papel.

Una buena preparación psicológica también debe contemplarse como parte de nuestra preparación para la oposición. A pesar de que el 99,99…% de nuestro tiempo y esfuerzo lo empleemos en estudiar antes de las pruebas, ese pequeño porcentaje de tiempo que corresponde al tiempo de hacer el examen, es increíblemente importante y nuestro estado de ánimo, cansancio mental en el momento, nervios, falta de energía, etc. pueden repercutir de forma relevante en nuestra calificación.

Por este motivo hacer simulaciones del examen, aprender a controlar los nervios y la ansiedad, mantener la mente despejada durante las simulaciones, saber gestionar el tiempo del que disponemos durante la prueba…. Son cuestiones de gran importancia.

Si quieres aprender a regular tus niveles de estrés o ansiedad y rendir de forma optima en una oposición, matricúlate en nuestro curso Rendimiento Bajo Presión, y aprende las herramientas que te ayudarán a mantener el mejor rendimiento durante todo el proceso de evaluación.

En Escuela de la Memoria somos especialistas en este campo, y sabemos lo importante que para una oposición, y trabajar con las mejores estrategias. Si quieres saber más sobre este tema, navega por nuestro blog o tienda on-line, o ponte en contacto con nosotros. Espero que este artículo te ayude a crecer como estudiante…

Feliz día.

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