Quiero compartir unas reflexiones sobre formación, material y maestros con todos vosotros.
Cuando queremos aprender, adquirir un conocimiento o unas habilidades, tenemos muchas opciones. Gracias a Internet tenemos muchísima información y recursos, pero también tenemos libros, revistas y Grandes Maestros.
¿Quiénes son los Grandes Maestros? Piensa quién es referencia de aquello que quieres aprender. ¿Quién es el mejor? ¿Quién tiene más experiencia?…
Esos!!! Esos son los Grandes Maestros. Cada sector tiene sus figuras, sus referencias y no hay mejor forma de aprender que estando cerca de ellos.
Estoy orgulloso de estar aprendiendo de un campeón del Mundo como Miguel Ángel Vergara, de aprender técnicas super-elaboradas de memoria con Paco Páez. Ellos son las mejores referencias.
Robert Kiyosaki, en su libro «Incrementa tu IQ financiero» habla de un amigo que cada año gasta miles de dólares en palos de golf, cuenta con el equipo más sofisticado pero su forma de jugar al golf sigue siendo la misma. Nunca invierte en formación, sólo en palos de golf. ¿No crees que sería mejor golfista si invirtiera parte del dinero en formación?
Eso mismo le pasa a millones de personas. Gastan su dinero en bienes materiales descuidando su formación.
La formación nos permite pasar de nivel.
Los autodidactas
Un término que se confunde habitualmente es autodidacta con autoformación.
Autoformación es buscar referencias y aprender por tu cuenta con ese material. Libros, cursos online, etc…
Autodidacta es aprender por uno mismo. Sería como redescubrir todo. Y aunque es algo muy bueno, tiene un par de inconvenientes:
- Normalmente hay alguien que ya sabe aquello que queremos aprender. Por lo tanto es más rápido si aprendemos de esas personas, de esos maestros, y si son los mejores serán Grandes Maestros.
- El conocimiento de estos Grandes Maestros suele ser de calidad. De forma autodidacta podemos llegar a conclusiones erróneas.
Con esto no quiero desanimarte a investigar y a crear nuevo conocimiento. Eso es fantástico y es lo que hace avanzar a la humanidad. Lo que digo es que muchas veces no necesitamos inventar nada nuevo, el objetivo suele ser utilizar conocimiento existente para nuestros fines.
Eso sí, y esto vale para cuando aprendas por tu cuenta o de cualquier otro. Hazlo con criterio, con pensamiento crítico. Cada vez hay más charlatanes y gracias a Internet pueden llegar a más gente que nunca.
